Los naranjos de Sóller y su historia
Los naranjos de Sóller y su misterioso valle atraen desde antaño a personas de muy diferentes lugares. Su historia siempre ha estado ligada a la de sus naranjos, historia a su vez marcada durante siglos por un enclave muy particular.
La situación orográfica del valle de Sóller, dota a su cuenca de un clima especial, muy diferente del resto de la isla. Unido al agua que fluye por sus torrentes y arroyos, la fertilidad de su tierra y el sol mediterráneo iluminándolo, hacen de Sóller el vergel de Mallorca. Y en ese vergel crecen unos naranjos junto a limoneros y clementinos.
El origen de los naranjos de Sóller
Existen dos especies de naranjos, los dulces y los amargos. Fueron los árabes los que introdujeron el naranjo amargo en Europa, a través del Sur de España en el siglo X, y parece ser que fueron ellos los que por mar los trajeron a Mallorca. La Mallorca musulmana (Medina Mayurca) comenzó en el año 903, año en que fue conquistada, fue el inicio de una época de luz, prosperidad y armoniasa convivencia de culturas. Siendo Sóller entonces, Sûlyâr.
El cultivo del naranjo dulce en España comenzó siglos después, en el siglo XV. Su origen está en la India.
¿Y cómo llegó desde la India a España? Todo apunta que fue a través de la ruta de la seda , red de rutas comerciales entre Asia y Europa, llegando a los reinos hispánicos en el siglo XV.
Del cultivo de naranjos dulces en Sóller dan fe crónicas mallorquinas de finales del siglo XVI. Y así fue como los avatares de estos naranjos de Sóller quedaron ligados al destino de su gente, convirtiéndose en la pionera de los cítricos de Baleares.
Es Port de Sóller, al rumbo de los naranjos de su valle
Port Sóller ( finales S XIX - XX)
Si resulta del todo imposible explicar la historia del Valle de Sóller sin sus naranjos, tampoco lo es sin su puerto, es Port de Sóller, éste alcanzó una enorme importancia comercial. Es Port de Sóller (único refugio natural de la costa Norte de Mallorca) fue vital en el desarrollo de Sóller, su canal de comunicación con el exterior, a fin de evitar las montañas que la aislaban del resto de la isla, gracias a él,llegó a ser la población mallorquina más abierta al mundo. ¿Quién entiende esta isla sin su mar?¿O Sóller sin es seu port ?
Fueron ellas, las naranjas y ese impulso irresistible de darlas a conocer al mundo, de exportarlas, las causas del inicio de su contrucción en 1772.
Siglos XIX y XX, momentos dulces y amargos de sus narajos
En la tercera década del siglo XIX ( 1830), la economía de Sóller creció de forma fuerte y continua, gracias a dos factores, una agricultura vigorosa y sólida con su raíz en el cultivo de olivos y cítricos, y la ascendente importancia comercial de su puerto. Esa bonanza económica, hizo que en 1835 los sollerics se lanzaran a la mar y decidieran emigrar, unos se fueron a hacer las Américas (Sóller lo recuerda con su Plaza América) y otros hacia el sur de Francia, con el gran anhelo de abrir nuevos mercados al comercio de sus cítricos. Lo consiguieron, ses taronjes de Sóller alcanzaron color internacional, Francia se rindió a su sabor. Los naranjos de Sóller vivían sus momentos más dulces.
Los naranjos, al fondo Iglesia de Sant Bartomeu
Un momento especialmente amargo llegó años después, hacia 1865 una plaga atacó casi todos los naranjos del valle, los payeses sollerics tuvieron que abandonar sus huertos, provocando una fuerte emigración conocedora de este cultivo hacia el Sur de Francia, Suiza, Bélgica y el Levante Español. Las naranjas de Sóller eran la principal fuente de riqueza de su valle. Esos payeses sollerics dejaron atrás sus huertos, su campo, ya no podían vivir de sus naranjos.
Años más tardes, esos emigrantes, descendientes de sollerics regresaron a Sóller a devolverle todo su esplendor, dándole ese carácter señorial, majestuoso, diferente, del que gozamos hoy al pasearnos por sus calles.
Fue a inicios del SXX cuando Sóller vivió un gran esplendor en el qus sus naranjos volvieron a florecer con él, el rey Alfonso XIII en 1905 le concedió el título de “ciudad”. En abril de 1912, se inauguraba el tren Palma-Sóller, hecho crucial para el valle de Sóller, poniendo fin a su aislamiento geográfico y natural. El tren era necesario para trasladar las mercancías que llegaban en barco del Port de Sóller a Palma, y por supuesto a las personas, en 1913 se inauguró el tranvía que une Sóller con es Port.
Los naranjos de Sóller en el XXI, su siglo más amargo
El viernes 30 11 12 Sa Veu (diario digital de la comarca de Sóller) publicaba una entrevista al Sr. Jaume Orell, presidente de la Cooperativa agrícola de Sóller donde reflejaba preocupado los momentos amargos que viven los huertos de cítricos de Sóller.
En sus líneas explicaba, que en tan sólo 15 años la producción de cítricos de Sóller había caido un 75%. En la década de los 90 la cooperativa comercializaba 2000 toneladas de cítricos, en el 2011 apenas alcanzaron las 500. Cultivar unos huertos de cítricos sanos suponen altos costes de mantenimiento, insoportables para el pequeño productor solleric. Agobiados y agotados por el escaso rendimiento y competitividad de sus cítricos en el mercado, se ven obligados a abandonar sus huertos.
En invierno la Cooperativa agota las naranjas producidas en Sóller, encontrándose ante una díficil encrucijada : importar naranjas de otras zonas productoras.
Sóller es el valle de los naranjos, los turistas acuden a la llamada de ese color y sabor, debemos mantenerlos, luchar por ellos, conservarlos, a fin de que las generaciones futuras puedan contemplar esa belleza con sus propios ojos. Evitar a toda costa que el Valle de Sóller se convierta en un recuerdo de postal. Estoy convencida de que lo conseguirán, los sollerics, todos aquéllos que viven en Sóller da igual donde nacieran, aman esa tierra y ese valle de forma incondicional, desde el corazón y con razón. Pasearos por su valle, por sus calles, por es port, escalad sus montañas o contemplad su puesta de sol, hagaís lo que hagaís, Sóller y sus naranjos os seducirán y os enamorarán !
Fira i jornades de Sa Taronja (2 al 17 /06) Sóller, Port de Sóller y Fornalutx
6ª edición 2012
Sóller abre la puerta a la esperanza, sigue en su lucha por ser el valle de los naranjos, el de simpre. Se reinventa gracias al carácter emprendedor de su gente, por eso desde el 2007 y durante dos semanas Sóller, Port de Sóller y Fornalutx celebran la Fira de Sa Taronja (Feria y jornadas de la Naranja).
Fira gastronómica donde esta fruta recupera su esplendor unido al de su hermoso valle donde se cultiva, madura y crece.
Restaurantes de estos lugares conjugando tradición e innovación preparan originales platos donde sa taronja,recupera el protagonismo del que es merecedora. Sa Fira se celebra casi acabada la primavera, del 2 al 17 de junio, prometiéndonos verano. Helados y sorbetes de naranja, clementina, limón, se me hace la boca agua!
Comentarios
Un comentario
Efectivamente Susana, los cítricos de Sóller, han sido motor de la economía del valle y su belleza ha cautivado a artistas y viajeros en todas las épocas.
No podemos convertirlos en “recuerdo de postal” Debemos entre todos mantenerlos cuidados, para que su imagen siga vendiendo Mallorca al turismo y puedan saborear la esquisitez de sus frutos.
El turismo de de nuestras islas, necesita el valor añadido de la agricultura como elemento diferencial, desestacionalizador y de futuro.
La agricultura necesita que toda la sociedad entienda y practique el consumo preferente de los productos locales.
Jaime Orell-Cooperativa Agrícola de Sóller